Cisjordania vive las jornadas más violentas de los últimos tiempos como resultado de una operación que fuerzas israelíes lanzaron este miércoles en el norte los territorios ocupados y ha dejado al menos 12 palestinos muertos, según informaron las Fuerzas de Defensa de Israel. El Ministerio de Salud palestino eleva los muertos a 16.
Las fuerzas de seguridad israelíes dijeron que habían comenzado durante la madrugada del miércoles «una operación antiterrorista» en Yenín y Tulkarem, en el norte de la Cisjordania ocupada, y que hasta el momento habían matado «desde aire y tierra a cinco terroristas armados”.
También informaron que otros cuatro murieron en un ataque aéreo durante una operación simultánea en el campo de refugiados de al-Faraa, cerca de Tubas.
Pese al llamamiento del secretario general de Naciones Unidas, Antonio Guterres, que exhortó a Israel a detener una operación que «está echando gasolina a una situación ya explosiva», las acciones de los militares israelíes en Cisjordania continúan.
Periodistas locales dijeron que no habían visto nada de esta magnitud y escala en Cisjordania desde los días de la segunda intifada palestina, el levantamiento masivo contra la ocupación israelí que tuvo lugar entre 2000 y 2005. La de las últimas horas se considera la mayor operación militar israelí en Cisjordania desde entonces.